En esta época es muy sencillo, casi natural, querer festejar con una botella de espumoso, así que aquí te damos unos tips para hacer ese maridaje más sencillo.
La ventaja que tienen la mayoría de los vinos espumosos es que cuentan con mucha acidez, lo que ayuda muchísimo como un “limpiador” del paladar, haciendo que sea más difícil abrumarse o aburrirse de los sabores. Además de que aunque sí es bien conocido que puede maridar bien con un caviar o algún platillo o ingrediente de alta alcurnia, tiene la gran maravilla de que es posible maridarlo casi con cualquier cosa.
Empecemos por los bocadillos, estos suelen llevar algún tipo de queso cremosos ya sea literal un queso crema o un queso de cabra fresco, pensemos en una tapa de queso de cabra con anchoas, con este bocadito sería perfecto un prosseco como el Freixenet, o también puede ser un Maschio.
Si pensamos en pastas o arroces cremosos, estos suelen acompañarse también por elementos cremosos o. una cantidad generosa de quesos maduros que suelen aportar salinidad, lo cual es poco probable que se encuentre en los vinos espumosos. Recordemos que tanto las burbujas como la acidez, nos ayudarán a balancear los sabores en el paladar, haciendo el bocado mucho más sabroso. Para este tipo de platillos podemos maridar con un Marques D´moja o un Chambrulet.
Ahora pensemos en los platos fuertes, estos varían tanto como las formas de festejar en estas fechas. Lo importante de los maridajes con espumosos es que tomemos en cuenta que, aunque si puede ser maridado con embutidos o carnes, es recomendable no utilizar salsas que sean muy picantes o avinagradas, ya que justamente será la acidez y las burbujas las que pueden aumentar de una forma no tan placentera. Lo ideal es que vayan acorde a la intensidad y que existan sabores o gustos en común.
Las salsas blancas tipo bechamel o herbales tipo pesto, también son un buen maridaje con los vinos blancos espumosos. Ya que por un lado ayudan a resaltar la parte láctica de las salsas en el caso de la bechamel, y por otro lado en el caso del pesto los componentes herbales resaltan más y resultan más brillantes. En este caso unas buenas opciones son Lobito de mar brut o Codorniu gran plus.
En algunas casas, en la cena de fin de año suelen haber mariscos, en el caso del ceviche o de un aguachile (no muy picante), los vinos espumosos son una buena elección ya que utilizan como puente justamente la base de acidez producida por el limón, lo que nos va a ayudar a crear este enlace que potenciará los sabores del platillo. Si seguimos con la idea de los pescados, el bacalao a la vizcaína, o cualquier pescado blanco también son excelentes opciones de maridaje, podemos probar con Chardon Garden Spritz o por ejemplo para no irse muy al lado ácido sino mejor balancear esta acidez, podemos optar por una opción demi sec que es un poco más dulce, pero no tanto como un néctar.
En el caso de los postres dependiendo de qué tanto seamos amantes del azúcar, podemos optar por una versión dulce como el Asti Cinzano dulce, el mismo Moët and Chandon néctar, si se tienen postres muy frutales tenemos las opciones de espumosos rosados como el Martini Rosé, el Chandon rosé, Riccadonna ruby, etc.
Algunos datos para tomar en cuenta con nuestro espumoso:
- No todos los vinos espumosos son champaña, aunque en su elaboración utilicen el método.
- Existen diferentes clasificaciones con base al azúcar añadido a partir de la segunda fermentación, lo que dará como resultado vinos más secos o vinos más dulces.
- La temperatura ideal de servicio es entre 5 y 7 grados.
- Se recomienda refrigerar el vino desde un día antes para que tenga la temperatura perfecta, en caso de que se nos haya olvidado podemos meter al congelador; solo es cuestión de revisar a los primeros 15 minutos. Recuerda, puede congelarse y explotar.
- ¡Jamás dirijas una botella hacia tu cara o la de alguien más!, hay muchos accidentes; la fuerza con la que sale el corcho es realmente alta.
- Aunque las copas coupé son hermosas, estás harán que nuestro vino espumoso pierda gas más rápidamente, opta por copas tipo flauta o alguna que sea larga.
- ¡Disfrutalo!
