Creado en el siglo XVIII por el farmacéutico francés expatriado a Suiza, Pierre Ordinare, el licor de ajenjo, también conocido como absenta, es uno de los licores con más historias turbias en torno a su consumo.
El ajenjo fue conocido en varias culturas antiguas por sus efectos medicinales. Existen referencias bíblicas, papiros egipcios y textos sirios donde se habla de la planta.
Los griegos, por ejemplo, lo describen como una hierba para controlar la fiebre, antiséptica y un antídoto eficaz contra el envenenamiento con cicuta, la planta con la que se enveneno a Sócrates.
Historia
La absenta es un destilado con una graduación alcohólica que va de los 40 a los 72 grados. A la maceración del ajenjo se agrega hinojo y anís verde, el color de esta bebida se obtiene por la clorofila de estas plantas.
La receta fue descubierta por Pierre Ordinare alrededor de 1792, y fueron las monjas del convento Couvet quienes comercializaban el elixir para después venderlo al Mayor Dubied.
En el año 1797 Dubied montó la primera destilería del producto a la cual llamó Dubied Père et Fils.
Fue tal la popularidad de la bebida que para 1805 Dubied abrió su segunda destilería en Pontarlier con el nombre Maison Pernod Fils.5.
Francia y Suiza aumentaron considerablemente el consumo de esta bebida que para el año de 1840 se ofreció a las tropas francesas.
Para el año de 1860 fue tal el auge que en Francia había tabernas y cabarets que denominaban las 5:00 pm como l’heure verte (“la hora verde”), asociando su consumo sobre todo con el movimiento artístico de la época.
De poción a inspiración de artistas
Desde un principio, la absenta se vio ligada a efectos secundarios entre sus consumidores, incluso hubo quien lo señaló como alucinógeno.
Se sabe fue la inspiración para artistas como Edgar Allan Poe, Vincent van Gogh, Arthur Rimbaud y Paul Verlaine, Oscar Wilde, Henri de Toulouse-Lautrec y Picasso.
La absenta se convirtió así en una protagonista de los cuadros de Picasso y se dice fue la culpable de que Vincent van Gogh cortará su oreja para regalarla a una prostituta en un bar parisino.
Hoy se sabe muchos de los cuadros del artista fungieron como pago a los dueños de estos bares a cambio de la misteriosa bebida.
“¿Cuál es la diferencia entre un vaso de absenta y el ocaso?”
Oscar Wilde
Culpable o no, se prohíbe
Su consumo aumentó, provocando una campaña de desprestigio en su contra. Se cree que fueron los productores de vino, entre ellos la iglesia, quienes la iniciaron.
Una de las historias negativas es la historia del suizo Jean Lanfray, quien aceptó haber consumido Absenta antes de asesinar a su familia.
En el año de 1910 Suiza prohibió su consumo, seguido de Estados Unidos en 1912 y Francia en 1915. Bélgica también la prohibió en 1915 y actualmente es el único país en el mundo cuya prohibición sigue vigente.
Hoy se sabe que el único componente ‘maligno’ del destilado es la tuyona o tujona, un aceite esencial que consumido en grandes cantidades puede ser tóxico y provocar convulsiones, no alucinaciones. Está tan diluido en el destilado que resulta inofensivo.
Caso contrario a la considerable cantidad de tujona que se encuentra en la pomada para desbloquear las vías respiratorias, tan famosa en los años 80s.
Con esto se concluye la absenta no solo es deliciosa, sino que resulta inofensiva y no representa un riesgo mayor al de cualquier bebida alcohólica. Recuerda, todo con medida.
El ritual
Tomar absenta es toda una experiencia. El método francés para hacerlo consiste en colocar el licor en una copa pequeña, y con la ayuda de una cuchara perforada diluir dos cubos de azúcar sobre la copa con agua extremadamente fría.
El resultado será un líquido nublado y lechoso conocido como ‘louche’.
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